¿Qué es una mamá gallina?

Una mamá gallina es;

«Una mamá que sacrifica sus cuidados personales y profesionales como un modo de adaptación o de afrontamiento en relación a la crianza de sus hij@s»

Cada vez es más frecuente ver las llamadas «mamás gallinas» protegiendo de sus polluelos, estando en todo momento a su lado, solucionando cualquier barrera que se les presenta, no quieren que sufran, y sobre todo no quieren perderse ningún momento con sus polluelos.

Quizás sea un patrón de aprendizaje aprendido de la sociedad, o por que no nos han enseñado otras alternativas que no, nos permiten cambiar ese «chip» que se activa en nuestro cerebro, que hace que todo gire en torno al cuidado de nuestros hij@s, pero lo que conseguimos es someter nuestras inquietudes y autorealización a alargar en el tiempo que nuestros hij@s sean más dependientes físicamente de nosotras, y se tiende a la sobreprotección del menor.

Sin embargo, no podemos estar más equivocadas. Cuidarnos y dedicarnos tiempos de desconexión es uno de los mejores ejemplos que podemos darles a nuestros hijos e hijas. El realizar esto es un simple acto de marcar un límite personal que se expande a lo relacional, y que mejor ejemplo les podemos dar a nuestros hij@s, marcar un límite sano para generar tiempo con ellos de manera sana y presente, pero empezando por una misma.

Les enseñamos el equilibrio de dar y recibir en la misma medida, no solo a nivel relacional sino también en relación a ellos mismos. Esto nos lleva a no depender emocionalmente de nuestros hij@s.

Si cuidas de tí, también los cuidas a ellos

No esperes a que ellos se hagan mayores para pensar en tí, y cuidarte, nuestros hij@s deben de aprender y enteder el valor del «amor propio» como algo primordioal para cada individuo, de no hacerlo, de no permirtirlo, hace que no puedas estar bien con otras personas y relaciones. Por lo tanto, les enseñas el aprendizaje de «amarse a uno mismo». 

Empezemos a sanar ese aprendizaje impuesto por la sociedad, creemos red de apoyo, que nos permita desarrollarnos personalmente y profesionalmente a la vez que disfrutamos del gran regalo de la maternidad. 

A día de hoy hay creencias muy limitantes marcadas por la sociedad, ejemplo de ello;

  • La mujer si trabaja, hay una parte de ella que abandona a la familia
  • La mujer si es madre debe de sacrificarse por la familia
  • La mujer si trabaja se pierde tiempo de ocio con la familia
  • La mujer es la que debe de parar mas tiempo en el ámbito laboral para la crianza de los menores

 

¿Y yo qué?

Ser mujer no es sinónimo de aguantar, de sobrepasar nuestros límites emocionales o de echarnos a las espaldas todas las cargas. Por eso, una madre sanada como mujer reconoce su valor en el mundo como un ser individual y con necesidades.

Como conclusión hay que destacar que una madre que, se atiende como mujer con todo lo que implica su ser de forma individual y respeta su tiempo y sus emocionalidades, criará y educará a los hij@s de formar más sana, dedicando ese tiempo de calidad a la disposición de ellos, y con ello puede lograr un equilibrio y trabajar en sus aspiraciones.